Uno de los medios de financiación con que cuenta el empresario de la construcción, al igual que cualquier otro tipo de empresario, radica en la prenda.

De manera rápida, sin otra necesidad documental que la de un simple contrato privado, y gracias a la garantía que el bien prendario significa, sea aportado por quien solicita la prenda o por tercera persona, se puede conseguir una liquidez que permita la solución momentánea del problema.